Tomás Gómez
Los plazos para la reducción de jornadas laborales, autorizados al inicio de la pandemia, vencen en diciembre pero la situación sigue sin retornar a la normalidad.
Ante ese escenario, la fracción de la Unidad Social Cristiana impulsa un proyecto que permita prolongar la medida hasta mediados del 2021.
La ley original establece que la medida rige por 3 meses y que podría tener dos prórrogas -la última acaba en diciembre. El proyecto busca que se puedan dar dos extensiones más de 3 meses cada una.
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“A partir de diciembre los patronos tienen que recibir de vuelta a los empleados o tienen que despedirlos pero dadas las circunstancias de la pandemia los patronos no tienen las condiciones de pagar los salarios y mucho menos de pagar las prestaciones”, explicó la diputada María Inés Solís.
Según el Ministerio de Trabajo, hasta el viernes anterior se habían presentado 79.000 solicitudes de suspensión de contrato y 157.000 para reducción de jornadas.
El comercio y el turismo siguen apareciendo como los sectores más golpeados.
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