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Presidente legislativo ve poco ambiente para más impuestos y pide gravar zonas francas

“Como presidente de la Asamblea Legislativa, que tengo el termómetro de lo que piensan los diputados y diputadas, me parece…

Por Paula Ruiz

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Presidente legislativo ve poco ambiente para más impuestos y pide gravar zonas francas
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“Como presidente de la Asamblea Legislativa, que tengo el termómetro de lo que piensan los diputados y diputadas, me parece que acogiendo el sentir del pueblo costarricense, no veo que haya ambiente para aprobar nuevos impuestos y sobre todo, para aprobar impuestos sobre la espalda de los que llevan una carga, de por sí, ya pesada…”.

Esa declaración forma parte del mensaje emitido por Eduardo Cruickshank, presidente del Congreso, tras la presentación de las propuestas gubernamentales de cara a la negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

La propuesta del Gobierno, incluye una serie de nuevos tributos para optar por un préstamo de $1.750 millones con el organismo multilateral.

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La nueva carga tributaria, debería de recaer sobre aquellos que gozan de exoneraciones como las zonas francas, según Cruickshank.

Lo anterior, es contrario a lo planteado por el Poder Ejecutivo, que desde el lunes anterior adelantó que las zonas francas continuarían exentas de impuestos. Pero para el presidente legislativo, sí deben de ser gravadas.

“Las zonas francas que hoy están exoneradas, deben contribuir a que el barco se mantenga a flote. Ciertamente, han sostenido el empleo porque es el sector que yo diría que no ha disminuido jornadas y no han despedido trabajadores, pero eso no los releva de la responsabilidad de contribuir en estos tiempos de flaqueza fiscal”, señaló el presidente del Congreso.

El equipo económico del Gobierno presentó este jueves las propuestas, cargadas de impuestos. (Christine Jenkins/ El Observador).

Voltear hacia evasión, elusión y contrabando

Otra de las propuestas del jerarca legislativo, guardan relación con que el Gobierno debe voltear la mirada hacia la evasión y elusión fiscal “porque representan $3.800 millones y no es una suma pequeña”.

Actualmente, el Congreso tramita un préstamo por $156 millones con el Banco Mundial a solicitud del Poder Ejecutivo. Con ese dinero, pretenden modernizar los sistemas de cobro del Ministerio de Hacienda y por tanto, prometen luchar contra la evasión y elusión.

Cruickshank también propone que haya una lucha frontal contra el contrabando, porque “significa una merma de ¢21.000 millones anualmente, que tampoco es poco dinero”.

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Finalmente, consideró que se deben de utilizar las reservas del Banco Central de Costa Rica (BCCR), antes de iniciar la negociación con el FMI.

“Llamar a la calma al pueblo costarricense y decirles que esto es una mera propuesta, falta mucho para que eventualmente pueda ser realidad y quizás nunca llegue a serlo porque no veo que mis compañeros diputados y diputadas, tengan la disposición de aprobar esta propuesta”, concluyó el presidente del primer poder de la República.

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El proyecto cuenta también con la oposición de otros legisladores. El mismo jueves, poco después de que se anunció el plan, varios congresistas dieron un no rotundo a nuevos tributos: se trata de toda la fracción del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), la liberacionista María José Corrales y seis diputados que integran el grupo de independientes afínes a Nueva República.

“Sí dejo claro que cualquier impuesto regresivo que venga a golpear el bolsillo de los costarricenses o disminuir el incentivo de inversiones para generar nuevos empleos, no contará con votos de la fracción”, advirtió Rodolfo Peña, jefe de fracción del PUSC.

Tanto grupos empresariales y financieros, así como expertos económicos y tributarios, también han mostrado su recelo por el plan del gobierno, el cual empezará a negociarse en octubre con el FMI.