Tomás Gómez
“Condeno la violencia brutal y homicida con la que se les ha atacado hoy: haremos recaer todo el peso de la ley sobre los responsables directos y los instigadores”, escribió el presidente Carlos Alvarado en Twitter esta noche.
El pronunciamiento llega tras una jornada de protestas que tuviero a Zapote como epicentro.
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Alvarado aseguró que la policía es “civilista” y que se buscará una solución legal.
“Somos un país de diálogo y de paz, pero también de leyes y de respeto a la vida”, concluyó.
Ante consultas de El Observador, Casa Presidencial confirmó que el mandatario estuvo en todo momento dentro de la sede de Gobierno.
Zapote fue campo de batalla
El balance del Ministerio de Seguridad contabilizó 11 policías heridos -2 de gravedad- y 28 detenidos.
La convocatoria hecha por el autodenominado movimiento “Rescate Nacional” y sindicatos contemplaba una marcha desde la Iglesia de la Merced hasta Zapote.
Una vez llegaron a Casa Presidencial, los manifestantes exigieron ser atendidos.
Los ánimos fueron caldeándose con el paso de las horas hasta que surgieron hechos anómalos como el ingreso de vehículos pesados que irrespetaron las órdenes de la Policía de Tránsito.
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Surgió también la violencia contra los policías y más amenazas que hicieron necesaria el uso de gases lacrimógenos según dijo el director de la Fuerza Pública, Daniel Calderón.
Según las autoridades de Seguridad incluso uno de los atacantes fue pasado a la Fiscalía bajo el señalamiento de intento de homicido por la forma en que se atacó al jefe policial de Alajuela, Milton Alvarado.
