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Monge sorprendió a tres pequeños hermanos de escasos recursos con tabletas para sus estudios

Monge sorprendió a Carlos, Raquel y Ángela, tres hermanos y vecinos de Heredia de escasos recursos, con una tableta que les permitirá…

Por Sergio Arce

Tiempo de Lectura: 2 minutos
Monge sorprendió a tres pequeños hermanos de escasos recursos con tabletas para sus estudios
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Monge sorprendió a Carlos, Raquel y Ángela, tres hermanos y vecinos de Heredia de escasos recursos, con una tableta que les permitirá continuar con sus estudios de forma virtual.

A pesar de no tener una conexión a Internet o un dispositivo que les permitiera acceder al
contenido audiovisual que comparten en su escuela, estos niños han salido adelante con sus estudios.

En estos últimos meses, para que los chicos no se atrasaran, las profesoras buscaron la
forma de imprimir los materiales que veían con los demás alumnos y coordinaron con doña Karol, madre de los niños, para entregárselos periódicamente.

El pequeño Carlos, estudiante de sexto grado, compartió que “con un rayo de sol que entra en el cuarto, me pongo a estudiar y hacer las tareas que nos dio la profe. Cuando las terminamos las vamos a dejar y aprovechamos para recoger el diario que nos da el MEP.

“Si pudiéramos tener al menos una tableta, estoy seguro de que podríamos estudiar mejor. Entre los tres la podríamos compartir para que cada uno tenga su tiempo. Yo necesito estar conectado para poder estudiar y ser lo que quiero ser, un gran abogado”, contó.

Por su parte, doña Karol, quien no concluyó la escuela, hace su mayor esfuerzo para acompañarlos en el aprendizaje y mantener a sus hijos estudiando. El deseo de estos chicos de estudiar para lograr sus metas motivó a sus profesores a gestionar la ayuda de Monge.

“La historia de Carlos, Raquel y Ángela nos inspiró, y desde nuestro programa de Buenas Acciones, le dimos una tableta a cada uno. Queremos impulsarlos a continuar luchando por sus sueños además de brindarles una herramienta para que puedan mantenerse estudiando”, explicó Carlos Fernández, gerente de Comunicación de Monge.

La progenitora comentó, además, que “los chicos desde marzo no ven a sus compañeros, ellos me estaban diciendo que querían algo para conectarse. Para mí, este regalo de Monge es una bendición, nunca pensé llegar a este momento donde cada uno cuenta con su propia tableta.

“Con estos dispositivos mis hijos van a poder tener una oportunidad para continuar estudiando, graduarse, salir adelante y ser las doctoras y el abogado que sueñan ser”, agregó.

Además de las tabletas, los niños recibieron un chip con conexión a Internet para cada uno de los dispositivos.

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