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Menos del 10% de los costarricense adopta una mascota, indica Senasa

La Ley de Bienestar Animal entró en vigencia en el 2017 ante una panorama muy dramático: más de 6 mil…

Por Elizabeth Rodríguez

Tiempo de Lectura: 3 minutos
Menos del 10% de los costarricense adopta una mascota, indica Senasa
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La Ley de Bienestar Animal entró en vigencia en el 2017 ante una panorama muy dramático: más de 6 mil denuncias por maltrato llegan al año al Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa). El abandono, la muerte o la pelea de animales se castigan con hasta dos años de cárcel.

Iliana Céspedes, directora de Bienestar Animal de Senasa, explicó que la cultura costarricense ha ido cambiando con respecto a la compra de perros de raza, y ha hecho que muchos decidan adoptar y rescatar mascotas que hayan pasado por momentos de maltrato y abandono.

“Sin embargo el porcentaje de adopción en Costa Rica es de menos del 10% con base en una encuesta del año 2016 realizada por la World Animal Protection”, agregó la veterinaria.

El primer paso, ya sea de adopción o de compra, es que la decisión se tome en conjunto. Así lo expresó Céspedes ya que incluir a un animal dentro de la dinámica familiar requiere gastos importantes:

  • de infraestructura
  • de alimentación
  • de atenciones veterinarias, tanto de prevención como de emergencia
  • de educación básica, por algún problema de comportamiento que presente
  • pero sobre todo conlleva dedicarle tiempo, atención y juego

Si la familia opta por comprar un perro de raza las recomendaciones son varias e importantes:

  1. que el criadero tenga un certificado veterinario de operación visible con fecha de vencimiento actualizada y el sello de Senasa
  2. un criadero responsable permite que el comprador vea las instalaciones y conozca a los padres del animal
  3. los animales deben de estar limpios, con interacción entre ellos y con espacios de juego
  4. mientras más especializado sea el criadero en una sola raza mucho, es mejor
  5. un espacio apto sin jaulas guindando que ni se les permite pararse en el suelo, ya que esto causa un montón de problemas a nivel de ortopedia
  6. que la vacunación se realice delante del futuro propietario, con un veterinario presente el mismo día de la compra (no aceptar una tarjeta de vacunas previamente realizada)
  7. revisar el contrato de la compra con cobertura de atención veterinaria por si llega a enfermarse los primeros meses

(Fotografía de portada: Territorio de Zaguates)

“Yo siempre aconsejo que si el perrito se enferma, nunca devolverlo. Si nunca le dieron las atenciones que requería, no lo van a hacer si lo devolvemos, y es probable que el animal termine en una muy mala condición”, confesó Céspedes.

Además acotó que durante los decomisos que ha realizado la institución en criaderos ilegales, la mayoría de veces tienen apartados a los animales enfermos, dejando morir de forma muy cruel a los que no tienen posibilidad de venta.

Los criaderos ilegales en nuestro país conforman más del 95%, ya que en Senasa solo se tienen registrados muy pocos que cumplen con toda la normativa requerida.

“Estamos trabajando en una normativa que nos genere mayor palanca para establecer ciertos criterios, cuántos animales tengo que reproducir para poder tener permiso, por ejemplo”, detalló Céspedes.

La crianza legal es una actividad comercial permitida por el Estado con licencias que emite únicamente el Senasa. Por esta razón, Céspedes recuerda que es responsabilidad del dueño del criadero acercarse a Senasa y registrar su negocio.

Colocan a los perros en jaulas para limpiar sus excrementos sin necesidad de asearlos ni atenderlos. (Senasa)

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¿Cómo denunciar?

El último decomiso realizado dio como resultado 32 perros, de los cuales el 90% tenía problemas de piel. En conjunto con Organizaciones No Gubernamentales (ONGs) se coordinan baños y la medicación necesaria, así como refugios para estos animales.

Es importante denunciar ante el Senasa sobre algún conocimiento de un criadero ilegal, haya sido por una compra previa o por rumores dentro de la comunidad. Así la institución puede llegar y realizar supervisiones.

Si al haber comprado un animalito y comprobar que se vendió defectuoso, después de realizarle el análisis veterinario correspondiente, se debe emitir un cobro mediante una sanción administrativa hacia el vendedor por lo ocasionado al animal (dentro del marco de la Ley de Bienestar Animal).

Asimismo se recomienda presentar la denuncia ante el Juzgado Contravencional del sector bajo la figura de maltrato animal y lesiones injustificadas.

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