Sergio Arce
Mikaela Spielberg, hija del afamado y multilareado director Steven Spielberg, anunció a un diario británico que se lanzará como actriz porno enfocada en el fetichismo y estríper, ya se que se considera una “animal sexual”. La noticia corrió como pólvora y fue ampliamente abordada por los principales medios de comunicación del mundo.
La mujer de 24 años aseguró al diario The Sun: “Lo cierto es que me cansé de no poder capitalizar mi cuerpo y de que me dijeran que tenía que odiar mi cuerpo. También me harté de trabajar día tras día de un modo que no satisfacía mi alma.
“Me apetecía hacer este tipo de trabajo, satisfacer a otras personas. Es algo que me hace sentir bien porque no me siento violada”, comentó Spielberg al citado medio, que agregó que la joven anunció su decisión a inicios de este mes mediante sus redes sociales, en las que además adelantó que su nombre artístico Sugar Star. En su cuenta en Instagram se hace llamar Vandal Princess.
“He lanzado mi propia carrera, autoproducida, en el mundo de entretenimiento para adultos. Que sea algo seguro, sano y consensuado es el objetivo. Mi cuerpo, mi vida, mis ingresos, mis elecciones”, aseguró en aquel momento, reprodujo el diario El País.
La mujer ya subió varios videos en la plataforma PornHub, pero fueron retirados ante la falta de lograr la licencia de trabajadora sexual en Tennessee, estado donde ella reside. Y aunque no es un requisito indispensable, ella dijo que desea que “todo sea legítimo”.
https://www.instagram.com/p/B877wPsh61I/?utm_source=ig_web_copy_link
¿Y qué piensan sus padres, el director y su madre Kate Capshaw? Ella contó que se los dijo hace unos días y se “sintieron intrigados pero no enfadados” por su decisión. “Para ellos, la prioridad siempre ha sido mi seguridad”, indicó al medio británico.
En cuanto a su relación con su prometido Chuck Pankow, de 47 años, dijo que no desea mantener relaciones sexuales en pantalla, sino solo videos enfocados en el fetichismo, porque sería “una violación” de sus propios límites.
Mikaela Spielberg fue adoptada por la pareja en 1996 cuando ella tan solo tenía un mes de vida. “Me he dado cuenta de que no hay ninguna vergüenza en estar fascinado con esta industria y en querer hacer algo sano, seguro y de consenso”, argumentó la integrante del clan Spielberg, integrado por sus padres -a quienes defiende a capa y espada- y a sus seis hermanos.
Mikaela relató que de pequeña sufrió acoso en la escuela por su apellido pero también por su apariencia física; también dijo haber sido abusada por personas allegadas a la familia. Y reconoció que en el pasado sufrió ansiedad, alcoholismo, anorexia y un trastorno límite de la personalidad.
