Hacienda El Viejo: fauna única, costumbres costarricenses y producción de ron, todo en Guanacaste

Muchos hemos transitado cerca del pueblo de Filadelfia, pero le pasamos de lejos para ir a las famosas playas guanacastecas. ¿Qué le parece si le cuento que, a unos 16 kilómetros del centro, se encuentra una hacienda que produce caña, y por consiguiente ron, que realza las costumbres costarricenses, y que además ofrece tours por el Río Tempisque?

Se llama Hacienda El Viejo y se encuentra en el bosque tropical seco, con todas las riquezas que esto conlleva, y que además colinda con el Río Tempisque y El Parque Nacional Palo Verde. Esto crea que la oferta de flora y fauna sea realmente hermosa y variada.

La propiedad cuenta con una extensión de 2 mil hectáreas, que a lo largo de 11 años se ha ido reinventando y atrayendo diferente público. Aquí se produce el 25% del azúcar de toda Costa Rica, con 18 variedades de caña.

“Nos visita mucho turista extranjero pero estamos haciendo un esfuerzo por llamar a los costarricenses para que también vengan a conocernos. Muchos ticos salen del país para buscar nuevas experiencias sin haber conocido por completo las riquezas de su propia tierra”, explicó Erick Méndez, gerente general de Hacienda El Viejo.

Tours de un día

El día comienza con la bienvenida de una casona que tiene más de 170 años de construida y que fue el hogar de personajes importantes de la política nacional e internacional. Fue la casa del expresidente Bernado Soto y, en los años 70s, de Anastasio Somoza, dictador nicaragüense.

Después de tomarse unos cocteles de bienvenida y disfrutar de unas frutas de temporada, la Hacienda lo invita a uno de sus tours estrella: un paseo en bote, por aproximadamente una hora, donde puede apreciar cocodrilos, aves y monos que le saludan a lo lejos.

Al regresar, la hora del almuerzo es muy apetitosa tras recorrer el río Tempisque. La gastronomía típica costarricense es protagonista en la Casona, y crea un ambiente hogareño entre todos los comensales.

La Casona tiene una capacidad para acomodar a 170 personas, si fuera el caso de un evento corporativo, una boda, una graduación o cualquier otra fecha especial que se quiera celebrar aquí.

Así mismo, se habilitó un espacio al aire libre, contiguo a la Casona, llamado Las Pérgolas del Viejo, que puede albergar hasta 600 personas, con un paisaje único de las plantaciones de caña y los humedales de la propiedad. Es lo más novedoso que presenta la Hacienda.

Costumbres costarricenses

Para representar de manera autóctona las costumbres costarricenses, un hombre vestido con su chonete, sandalias de cuero y atuendo típico, y una mujer con su vestido folclórico, esperan a los visitantes, al lado de un buey, que muestra cómo se molía la caña para exprimir su jugo.

El buey gira un antiguo trapiche con sus cachos, mientras algún turista se ofrece para ir metiendo la caña de azúcar y sacando el jugo. Al final, el campesino toma un merecido trago como fruto de su trabajo.

Como buen tico, la hora del café tiene que disfrutarse con algún acompañamiento. En Hacienda El Viejo, se realiza una demostración muy típica mediante el Tour Cultural Casa del Sabanero, el cual incluye un recorrido por, el que fue en su momento, el hogar del antiguo mandador de la finca.

Muestra su vestimenta, sus herramientas, pero sobre todo, su manera de cocinar y comer. Como parte del tour, se aprende a palmear tortilla y a ponerla al fuego de un horno de leña, además de probar las famosas rosquillas y tanelas acompañadas de un buen café chorreado.

“Sin roble, no hay ron”

Y de último, pero no menos importante, está el Tour de Ron Sabandí. Este es quizás uno de los recorridos más completos e interesantes de todas las actividades que organiza Hacienda El Viejo.

“Aquí deseamos, no sólo que vengan a conocer, sino que aprendan todo acerca del ron y de cómo se produce, para que salgan siendo expertos”, aseguró Roberto Altamirano, el encargado de realizar el tour por todas las estaciones que ofrece la propiedad.

En Hacienda El Viejo se creó una zona franca donde se extrae el jugo de caña, se destila, se fermenta y se añeja para así crear su propio ron.

En junio de este año, se planea sacar el primer destilado del jugo de caña y dejar un periodo de cuatro años de añejado para lograr un ron de calidad que esté listo para la venta.

“La biomasa de la fibra de la caña de azúcar de Hacienda El Viejo, se utiliza para generar energía eléctrica, de la cual más de 40 mil hogares de la zona, salen beneficiados gracias a este ingenio”, agregó Altamirano.

El tour finaliza con la degustación de infusiones a base de ron, mezclado con especias y frutas deshidratadas para cerrar esta experiencia con una vista hermosa, en una terraza guanacasteca, viendo la puesta del sol.