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Financiamiento empresarial alternativo: Parte 3

Carlos Peña para El Observador En esta tercera entrega sobre métodos de financiamiento nos enfocaremos en dos herramientas financieras útiles….

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Tiempo de Lectura: 3 minutos
Financiamiento empresarial alternativo: Parte 3
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Carlos Peña para El Observador

En esta tercera entrega sobre métodos de financiamiento nos enfocaremos en dos herramientas financieras útiles. Estas son:

  1. Crowdlending
  2. Venta de capital accionario

OBSERVE MÁS: Financiamiento empresarial alternativo: Parte 2

En el caso del crowdlending, similar al crowdfunding mencionado la semana pasada, se obtiene por medio de plataformas online. Básicamente son préstamos que personas individuales le hacen a empresas o emprendedores.

En el crowdlending, a diferencia del crowdfunding, las empresas deben de devolver el dinero prestado con un interés a pagar. Sorprendentemente este tipo de plataformas en México ha tenido gran éxito y crecimiento.

Basado en la buena fe y reputación

Este tipo de préstamos se basan en la buena fe y reputación que tengan los emprendedores. Por eso es vital crear un perfil online atractivo, que transmita seguridad explicando con detalle el proyecto.

Finalmente, la venta de capital accionario con el fin de levantar capital para inversión o trabajo. Esta es la forma más cara de financiamiento existente, porque se entrega lo más valioso que tiene cualquier empresa: las utilidades.

Cuando se recurre a la venta de acciones es necesario analizar el por qué se hace y qué tipo de socio inversionista se trae a la mesa. No es solo recibir capital (que no necesariamente es dinero, puede ser en forma de activos como edificios, maquinaria o personal), sino también es analizar el perfil del nuevo socio y sus aportes al negocio.

Venta de acciones… lo que usted debe saber

El vender acciones conlleva no solo alguien más dentro de la toma de decisiones, también conlleva la rendición de cuentas.

Los socios nuevos tienen derecho a toda la información financiera y operativa de la empresa y, por ello, la persona emprendedora debe de estar abierto a preguntas, debates y cuestionamientos, sin enojarse y entendiendo que es parte del ser de una sociedad.

Muchos empresarios he conocido, cientos podría decir, que necesitando capital y teniendo las otras opciones de financiamiento cerradas, prefieren quedarse pequeños. O, peor aún, quebrar antes de tener un socio dentro de su negocio. Todo por esa absurda idea de “prefiero ser dueño de poco pero saber que es mío”.

Eso es sencillamente tener una mente pequeña y no ver que con socios puede existir nuevas oportunidades inimaginables.

Los socios pueden aportar:

  • Conocimientos técnicos
  • Contactos
  • Habilidades nuevas

Aporte de los nuevos socios

Por ello, cuando se vende participación de una empresa, no debe de ser exclusivamente para obtener capital. Debe de analizarse los aportes intangibles de estos socios.

En lo personal tengo socios “silenciosos” en mis proyectos (este es el término empleado cuando una persona solo aporta dinero pero no participa de la operación ni la toma de decisiones).

Pero por una decisión de ellos mismos, en algunas ocasiones es bueno en otras brinda retos importantes, porque uno como responsable del proyecto debe de cumplir completamente con los recursos que tenga y sin excusas.

Cuando uno tiene socios en la empresa no puede decir que no, no puede fallar ni puede mentir. Porque al primer fallo se pierde la confianza y los chismes vuelan muy rápido, especialmente entre inversionistas.

Al vender capital accionario haga una buena valuación de su negocio, he visto también a muchas personas desubicadas pidiendo siempre millones de colones por participaciones ridículamente bajas y sin mayor compromiso.

Mi recomendación en estos casos es que se busque socios que no sobrepase el 10% de acciones por persona. Otorgue preferiblemente acciones comunes (las preferentes son las que hay que pagar sí o sí todos los periodos), suscriba buenos acuerdos de socios (estipule con claridad los roles de cada persona) y nunca prometa algo que no pueda cumplir.

Tener socios es peor que tener un jefe, porque los socios no se van a ir, tienen mucho poder y, si invirtieron en su negocio, es porque tienen muy altas expectativas de usted como persona.

Las empresas serias que quieren crecer deben de asociarse con otras personas, es imposible en el mercado actual crecer solo y sin recursos externos.

Los mercados hoy en día son complejos, inciertos y altamente competitivos, no trate de crecer solo. Si usted tuviera el capital para contratar asesores y crecer solo pues mis felicitaciones, pero el resto de los mortales tenemos que buscar socios para lograr proyectos con crecimiento.

Dicho esto quisiera agradecer a mis socios en mi proyecto de finca maderera que confiaron en mí, en el proyecto y que tomaron la decisión de invertir en el inicio de la peor crisis económica de la historia. A ustedes gracias por su valentía y mi eterno agradecimiento y compromiso.