Redacción El Observador
La ruta entre Tamarindo y Playa Langosta, en Santa Cruz, Guanacaste, mostrará una cara distinta el próximo año.
Esta semana arrancaron las obras de intervención de la ruta de 2,5 kilómetros.
Los trabajos abarcan la rehabilitación y mejoramiento de los sistemas de drenaje, construcción de cordón y caño en los tramos faltantes y de la calzada de rodamiento en losa de concreto.
Así quedaría el proyecto bajo el concepto de “calle competa”. (cortesía)
Además, en 450 metros de este trayecto se aplicará el concepto de “calle completa”. Esto incluye la construcción de infraestructura peatonal como aceras, rampas y pasos peatonales tipo cebra. Además, contempla una ciclovía segregada y compartida, y los respectivos carriles para automóviles correctamente definidos.
Se tomará en cuenta también el transporte públco y de carga. Todos estos componentes acordes con la Ley 7600.
Este proyecto se diseñó con el apoyo de la Cooperación alemana GIZ y busca convertirse en un modelo para el desarrollo de infraestructura vial en el país.
“Bajo el modelo de la Pirámide de la Movilidad, estos diseños permiten que los actores viales convivan en armonía, aumentan la seguridad vial y favorecen el desplazamiento eficiente de todas las personas en una vía totalmente inclusiva”, detalló el ingeniero Edgar May, gerente general de la Unidad Ejecutora y de Coordinación.
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En previsión a que se puedan ampliar las obras, dos de las intersecciones serán elevadas a nivel de acera con el fin de motivar a que los conductores reduzcan la velocidad y así aumentar la seguridad vial de los peatones.
El proyecto está previsto para concluirse en el primer trimestre de 2021. Forma parte de las 11 obras que componen el Paquete 2 del Programa de la Red Vial Cantonal II, el cual se ejecuta con fondos provenientes de un crédito con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
