Finanzas

120.000 clientes bancarios podrían quedar sin tarjeta de crédito por tope a intereses

Al menos 120.000 clientes podrían quedarse sin tarjeta de crédito cuando entre en vigor la reforma a la ley 7472…

Por Christine Jenkins Tanzi

Tiempo de Lectura: 5 minutos
120.000 clientes bancarios podrían quedar sin tarjeta de crédito por tope a intereses
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Al menos 120.000 clientes podrían quedarse sin tarjeta de crédito cuando entre en vigor la reforma a la ley 7472 que impone un tope los intereses del 39% a los créditos y otros financiamientos en colones, según Bernardo Alfaro, Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef).

La reforma, publicada el sábado en La Gaceta para regir en julio, establece la fórmula que deberá usarse para fijar la tasa de interés máxima, por encima de la cual se considerará que se configura el delito de usura. Este tope comenzaría a aplicarse únicamente en los préstamos o financiamientos nuevos, con la publicación de la tasa estimada por el Banco Central.

Los clientes menos riesgosos y sin afectación a su capacidad de pago serían quienes podrían beneficiarse de la menor tasa, debido al tope, al tiempo que otros perderían acceso a su tarjeta, explicó Alfaro ante consultas de El Observador.

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“A algunos costarricenses que califiquen posiblemente les bajen la tasa de su actual tarjeta, ya que son clientes rentables en su relación financiera integral con el proveedor del plástico; ese grupo se verá favorecido”, según el Superintendente.

“Por otra parte, la estimación de algunos banqueros consultados es que a unos 120,000 clientes ya no les mantendrán la tarjeta cuando rija la disposición”, agregó.

En el país existían alrededor de 2.945.000 tarjetas en circulación en enero, incluyendo las titulares y adicionales. Sin embargo, las tasas varían con alguna frecuencia por lo que es difícil saber cuántas tarjetas están por encima del límite en este momento, según Alfaro.

Nuevo tope

La ley establece que el Banco Central de Costa Rica (BCCR) tendrá que realizar la primera fijación de la tasa anual máxima en la primera semana del mes de enero o julio, posterior a la entrada en vigencia de la presente ley.

La tasa máxima de interés para todo tipo de crédito se define por una fórmula establecida por los diputados que suma el promedio de la tasa de interés activa del mercado de los últimos doce meses más 12,8 puntos porcentuales. Además, esa cifra se debe entonces multiplicar por 1,5 para establecer el límite, es decir:

Tope = (Tasa de interés activa + 12,8 puntos porcentuales) * 1,5 veces

El texto establece que el Banco Central usará las tasas promedio de los doce meses anteriores a la primera semana del mes de julio, por lo que aún no se conoce el monto definitivo.

Sin embargo, alcanzaría alrededor de 39% en colones y 31% en dólares usando el promedio de la tasa publicada por el BCCR semanalmente durante esos meses. Los microcréditos que no superen alrededor de ¢675.000 tendrán una fórmula diferente para calcular el tope máximo, con un tope inicial de 55%.

Las tasas máximas se aplicarán para todo contrato, negocio o transacción efectuado en el semestre siguiente al de su publicación. Además, cada seis meses se recalculará.

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Solo préstamos nuevos

La normativa no tiene carácter retroactivo, por lo que solo le aplicará a quienes adquieran sus créditos tras la entrada en vigencia de la ley.

La Sugef, además, tendrá la responsabilidad de revisar que los créditos no excedan la tasa anual máxima de interés para todo tipo de crédito. En caso de determinarse un incumplimiento, la Superintendencia deberá denunciar ese hecho al Ministerio Público.

“Es difícil saber cuántas tarjetas están por encima del límite en este momento, porque las tasas varían con alguna frecuencia, y también lo hará la tasa de usura según fue diseñada por los señores Diputados”, indicó el superintendente Alfaro. (Foto: Paula Ruiz / El Observador).

La ley además prohíbe otorgar financiamientos que super el límite al incorporar a la tasa de interés costos además los gastos, multas o comisiones.

Se considera parte de la tasa de interés de la operación cualquier cargo, costo financiero o comisión exceptuando nada más las gestiones de cobranza administrativa, que debe ser menor a $12.

“Para el sector regulado estamos desarrollando un XML (protocolo tecnológico de remisión de información) junto con el área de TI del BCCR, por medio del cual las entidades nos remitirían la tasa efectiva que corresponde a cada uno de sus productos. Deberán remitirlo mensualmente y en nuestras inspecciones efectuaremos revisiones aleatorias para corroborar el mecanismo de cálculo”, adelantó además Alfaro.

Ejecución aún no está clara

Las tasas de interés no bajarán para la mayoría de los préstamos, incluyendo los hipotecarios, que se alejan de los nuevos topes, explicó Danilo Montero, director ejecutivo de la Oficina del Consumidor Financiero (OCF), una iniciativa de los bancos públicos y privados afiliados a la Asociación Bancaria.

“Si todos mis créditos están por debajo de ese techo, yo no voy a ver ningún efecto”, según Montero.

El impacto en el sector regulado se concentraría en las tarjetas de crédito, que concentran alrededor del 14% de los préstamos, con lo que se esperaría que los bancos indiquen a los clientes los cambios a partir del anuncio del tope que establece el Banco Central, agregó.

“Todavía está por verse cómo va a funcionar el tema de los saldos que ya hoy tengo en la tarjeta de crédito, si van a reducirse o si son solo los usos posteriores que haga en la tarjeta los que se van a contabilizar con una tasa de interés más bajo. Eso no lo tenemos tan claro y por lo menos nos animaríamos a anunciar que la tasa se va a reducir automáticamente para los saldos que ya están en las tarjetas”, contestó.

Las entidades financieras posiblemente, con la ley en la mano, tendrán que revisar la redacción para determinar cómo se manejarían los saldos pendientes y es posible que terminen consultando a la Sugef o inclusa una aclaración de las cortes. 

Además, podría verse un impacto en todo el crédito que no está regulado, según Montero.

“Esos que están con tasas del 5% al 7% mensual, todos tendrán que jugársela porque ahora es un delito seguir prestando a tasas altas, o no volver a prestar y salir del mercado o solo otorgarle crédito a gente de muy buen nivel con los cuales el riesgo se paga con tasas de interés como las que pagan el máximo que establece la ley”, agregó.

Advertencia de bancos

El Banco Central de Costa Rica, la Superintendencia de Entidades Financieras (Sugef) y Consejo Nacional de Supervisión de Sistema Financiero (Conassif) advirtieron en varias ocasiones sobre el riesgo de exclusión financiera que conlleva la aprobación de la ley.

También se pronunciaron los jerarcas del Banco Nacional y el Banco de Costa Rica, ambos estatales, quienes hicieron observaciones sobre el texto aprobado, pues a su juicio contiene errores conceptuales y «figuras intervencionistas» que atentan contra la libertad contractual y de comercio.

Señalaron que lo incorporado al texto no configura el delito de usura, sino que solamente fija un límite a los intereses.

«Es nuestro criterio que, en esta propuesta de ley, se estaría fijando un tope de tasas y no una tasa de usura (interés excesivo en un préstamo)», indicó el oficio GG-292-20 firmado por Gustavo Vargas, gerente del Banco Nacional.

La Cámara de Bancos y el Banco Central indicaron que esta semana podrían referirse a la nueva ley publicada el sábado.